OBSCENIDAD

Baño de fieles para Francisco Camps, todavía presidente de la Comunidad Valenciana, e imputado por un supuesto delito de cohecho impropio (lo de los trajes, vamos).Ante el descojone de la alcaldesa Rita Barberá (hay que ver lo campechana que es ella), Camps reclamó para su gobierno una medalla mundial "interplanetaria. Sería para desternillarse, si no fuera tan patético.

Eso sí Camps sostiene que el caso Gürtel, ese en el que los propios se pusieron las botas y además inflaron las arcas del PP, es un invento de los sociatas que le tienen envidia por ser tan popular.

Como a estas alturas uno tiene poca confianza en los jueces, es hasta posible que salga límpio de polvo y paja de semejante escándalo. Pero es lo que hay, que no lo que nos merecemos.

¡Qué desfachatez!.¡Qué obscenidad!