OTEGUI-OTEGI

En este país tenemos la mala o buena costumbre, depende de swegún nos convenga, e aplicar las leyes al pie de la letra o ser de lo más flexible. Lo hacemos en casi todos los asuntos y aplicando una infinidad de variables.

Viene esto a cuento a propósito de Batsuna y su lider, Otegi. Durante mucho tiempo, proc eso incluido, se quiso demostrar que el susodicho y su organización tenían una clara vinculación con Eta, por lo que fueron barridos legalmente del escenario político español. Digo legalmente porque en el País Vasco siguió siguieron haciendo de las suyas y están más que bien representados en el parlamento de Vitoria.

En los últimos tiempos se viene observando que de nuevo Otegi alcanza protagonismo a nivel nacional (¿o hay que decir estatal?) y que su opìnión parece que le importa a algunos. Seguramente porque el gobierno de ZP con eso de facilitar el camino a la paz, o como otros dicen, la salida al conflicto, no quiere complicaciones y vuelve a dar voz a los que por ley deberían estar mudos.

Y así se llega a la extravagancia de contar con pelos y señales lo que el señor Otegi y su banda ilegal dicen, hacen o dejan de havcer. El último ejemplo lo tenemos hoy en la radio nacional española. Esa emisora pública no muestra ningún pudor en dar cuenta de la presentación de un libro de Otegi y, lo que es peor, de poner su voz, con más duración de lo deseable, poniendo a parir al PP y de paso al PNV.

O hace mucho que no sé de que va este país, o nos debemos estar volviendo un poco locos. Y lo digo porque en la BBC, en la que tanto gustan de mirarse, una cosa así sería impensable. Jamás difundieron un comunicado del IRA ni se ofrecieron declaraciones de Gerry Adams. Salvando todas las distancias, parece increible que la radio pública española se haga eco de las declaraciones de un individuo que según sentencia tiene vinculaciones con Eta y que habla sin rubor defendiendo los intereses de la banda terrorista. Es increible, pero cierto. Y lo han hecho durante todo el día.No sé si reciben instrucciones del gobierno, por aquello de apoyar su estrategia de allanar caminos y de paso darle un palo a la oposición. Lo que sí tengo claro es que eso no está bien, no está nada bien, y por ello no tengo que estar necesariamente de acuerdo con Rajoy.

Creo que deberíamos reflexionar y para creernos esto del estado de derecho bien estaría que empezaran por respetarlo los medios de comunicación públicos.

Salud.