ATÓNITO

Atónito. No puedo por menos que confesarlo. Poco más de dos meses en el palacio de La Moncloa y lo ha puesto todo patas arriba. Y no precisamente por arrojo o valentía. Lo que se está viendo es un encadenamiento de improvisaciones, tendrán que serlo porque no estaban en su programa electoral, que nos van a poner a la sombra durante mucho tiempo. Un paso atrás gigantesco, amparándose en que la crisis económica los justifica todo, del que tardaremos muchos años en recuperarnos. Y digo improvisaciones porque sino estaremos ante todo un adalid de la mentira, él que se llenó la boca llamando mentiroso al anterior presidente. Porque el zarpazo a los derechos laborales con la excusa de combatir el paro, la subida brutal de los impuestos por aquello de combatir el deficit, o el engaño descarado a los pensionistas con el te subo y poco y te quito mas, no estaban en su programa, es más acusó a los socialistas de subir impuestos provocar más paro con las reformas laborales anteriores y por congelar las pensiones. Pero ahí están..

Actuan con una desfachatez que solo es posible por sus abultadas victorias electorales y se han puesto a removerlo todo, más allá de la actuación para combatir la crisis, para darle una mano de pintura ultra a toda la política social y de libertades. Crecidos que están. Y se les va a ir la mano, porque la pinza ya la han perdido.

Creo que se equivocan si creen que una mayoría absoluta les permite subir impuestos a troche y moche, hacer casi gratuito el paro, poner a pensionistas y clases más desfavorecidas contra las cuerdas, recortar en Sanidad y Educación hasta ahora intocables, acallar a jueces molestos, relevar a responsables de investigar el Gürtel, utilizar juego sucio en las elecciones andaluzas, copar los medios de comunicación, apalear manifestantes, plegar la ley del aborto a las exigencias de los más ultras, privatizar servicios públicos perfectamente rentables, criminalizar a los sindicatos, resucitar teorías conspirativas en el 11-M....y lo que veremos a finales de marzo.

Están que se salen. Pero, se equivocan. Seguro. La paciencia tiene un límite y la chulería y la prepotencia son un peligroso corrosivo.

Salud