MADRID, ¡TENGO UNA CORAZONADA!

Lo cierto es que la dichosa frasecita da en el clavo. En efectiva y emotiva, a pesar de rozar lo cursi. Pero lo es porque llega, la iniciativa, al corazón de la gente. Moviliza. Y eso, cuando se publicita algo es, sin duda, lo más efectivo. El problema aquí está en que no depende de la movilización de los ciudadanos, sino de la decisión de un grupo de elegidos, que puede desbaratar con su decisión ese castillo de sueños.

Vaya por delante que apoyo la celebración de unos juegos en Madrid. Molaría. Pero en la candidatura para los del 2016 veo algunos fallos esgtratégicos, y no yo sólo obviamente. El principal la oportunidad de volver a presentarse tras fracasar en la ocasión anterior y más sabiendo que es poco probable (dejémoslo ahí) que vuelvan a dar a Europa otros Juegos siguiendo a los de Londres. A esa regla no escrita hay que añadir el peso de las otras candidaturas: sobre todo las de Rio de Janeiro (creo que se los llevará) y Chicago (efecto Obama). Todo esto se ha dicho por activa y por pasiva durante los últimos meses, por lo que no voy a insistir. Pero sí quiero subrayar la responsabilidad política de esta iniciativa. Y concretamente la del alcade de Madrid, Ruíz Gallardón.

Verá don Alberto. Lo de los juegos está muy bien y espero que sea consciente de que se está jugando el todo por el todo. Es decir, ya que no ha tenido usted en cuenta la fallo en la oportunidad de la convocatoria, quizá debería haber puesto en la balanza otros factores: por ejemplo todo el dinero que ha consumido esta historia (algunos lo llamarían despilfarro) y más en tiempos de crísis como los que vivimos. Es verdad que en crisis es bueno generar entusiamo por algo, pero tanto como para soltar esas millonadas, no sé..... Porque se, se nos, ha ido un dinero en montar la oficina olímpica, con sus directivos y ayudantes varios, sus sueldos y dietas, la organización de todo tipo de eventos y agasajos, la promoción dentro y fuera de España, los viajecitos.... No sé cuanto es, pero imagino que muchísimo.... Están además las instalaciones olímpicas construidas o en vías de, cuya utilidad, a ese precio, si no nos dan los juegos sería más que discutible. Y, por último, el derroche en las emociones de la gente. Porque está bien lo de ilusionar, pero no se si merece la pena tanta frustración si, al final, no cae la breva. Y es que con los sentimientos de la gente no se debería jugar.

Usted, alcalde, juega fuerte. Y ayer logró movilizar a decenas de miles de personas en Madrid. Pero eso tiene un precio y si la cosa no sale..... En fin que debería ir teniendo claro que su carrera política tiene necesariamente que ir ligada a este proyecto. Si gana Madrid, ganamos todos y usted muchísimo. Si perdemos, tendremos que ver como superamos esa imagen de losers que circulará por el mundo. Pero usted debería ser consciente que hasta ahí llegó su aventura política. Ha apostado fuerte y le deseo toda la suerte del mundo, pero si al final no vienen los Juegos le recordaré lo que debe y tiene que hacer.

Mientras tanto, ¡tengo una corazonada!. Madrid 2016.